02 de Agosto, 2009 - Este domingo la ciudad de Cipolletti amaneció distinta: Don Bosco se hizo presente y toda la comunidad lo pudo visitar y homenajear en la Casa Emaús, donde estuvo desde las 9 de la mañana. A las 11.20 se inició la misa que presidió el Padre Obispo de Alto Valle de Río Negro Néstor Navarro y acompañaron los salesianos Manuel Cayo, Fabián Colman y Diego Zupan.
Desde la mañana se pudo observar en las calles céntricas las huellas de los salesianos que estuvieron y están en este lugar, a través de grandes dibujos plasmados en el cemento.
Pañuelos de colores y lágrimas de emoción recibieron las reliquias del “Padre y Maestro de los jóvenes” junto con el grupo musical "Cambio Profundo", que, como un “coro de ángeles”, animó la misa con canciones de rock.
El Padre Manuel Cayo resaltó que Don Bosco en el patio era uno más entre sus muchachos e imploró para que nos ayude a hacernos santos.
Sobre el final de la celebración un grupo de jóvenes, entre los que se encontraban los prenovicios de Argentina Sur, interpretaron el tema Santo Callejero (ver recursos) con una representación que tuvo baile y actuación.
El cálido aplauso de la gente que se manifestó en varios momentos de los festejos despidieron al sacerdote turinés, que cerca de las 14.30 partió en caravana para la ciudad vecina de Neuquén, acompañado de la sirena de los bomberos.
Una multitud con globos de colores que llevaban la cara impresa de Don Bosco recibieron las reliquias en la Parroquia San José Obrero donde se celebró una misa.
A las 17.30 la fiesta continuará en el colegio San Juan Bosco de Neuquén, donde también asistirá la comunidad cipolleña.
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