En el corazón de la romería de Nuestra Señora de la Candelaria, día 1 de febrero, Juazeiro do Norte recibió la visita de las reliquias de Don Bosco. El Padre Cícero llamaba a los hijos de Don Bosco de Devotos de María Auxiliadora y deseaba que viniesen a morar en Juazeiro.
Los salesianos llegaron a Juazaeiro, y esperaban ansiosos la llegada de la urna con las reliquias del fundador. La urna fue colocada en un carro abierto y desfiló por las principales calles de la ciudad, en dirección al Huerto del Padre Cícero. En la colina del Huerto la urna de Don Bosco fue colocada en el centro de la iglesia de Buen Jesús, que está siendo construida por los salesianos. Muchos romeros visitaron las reliquias.
Al descender la colina del Huerto, Don Bosco fue a visitar al amigo Cícero, como estaba estampado en las playeras hechas para el evento. La urna entró en la iglesia del Perpetuo Socorro donde está sepultado el P. Cícero. Fue un momento de gran valor simbólico: el santo de Turín con el Padrecito de Juazeiro. El P. Cícero fue un célebre sacerdote del Brasil, destacado por su apostolado de caridad y fue quien logró que los salesianos llegarán a esta ciudad.
En la tarde llegó al Santuario del Sagrado Corazón, al lado del Colegio Salesiano. El prefecto de la ciudad y el obispo, Don Fernando Panico de la diócesis de Crato estaban presentes para acoger la urna, donde develaron una placa conmemorativa. Durante la noche, los juazaeirenses permanecieron en vigilia y orgullosos decían: estamos agradecidos con el Padre Cícero por traer a los salesianos a Juazeiro do Norte. Agradecidos también con Don Bosco por aceptar la invitación y estar en nuestra ciudad desde hace 70 años a través de sus hijos e hijas.
Los salesianos llegaron a Juazaeiro, y esperaban ansiosos la llegada de la urna con las reliquias del fundador. La urna fue colocada en un carro abierto y desfiló por las principales calles de la ciudad, en dirección al Huerto del Padre Cícero. En la colina del Huerto la urna de Don Bosco fue colocada en el centro de la iglesia de Buen Jesús, que está siendo construida por los salesianos. Muchos romeros visitaron las reliquias.
Al descender la colina del Huerto, Don Bosco fue a visitar al amigo Cícero, como estaba estampado en las playeras hechas para el evento. La urna entró en la iglesia del Perpetuo Socorro donde está sepultado el P. Cícero. Fue un momento de gran valor simbólico: el santo de Turín con el Padrecito de Juazeiro. El P. Cícero fue un célebre sacerdote del Brasil, destacado por su apostolado de caridad y fue quien logró que los salesianos llegarán a esta ciudad.
En la tarde llegó al Santuario del Sagrado Corazón, al lado del Colegio Salesiano. El prefecto de la ciudad y el obispo, Don Fernando Panico de la diócesis de Crato estaban presentes para acoger la urna, donde develaron una placa conmemorativa. Durante la noche, los juazaeirenses permanecieron en vigilia y orgullosos decían: estamos agradecidos con el Padre Cícero por traer a los salesianos a Juazeiro do Norte. Agradecidos también con Don Bosco por aceptar la invitación y estar en nuestra ciudad desde hace 70 años a través de sus hijos e hijas.
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